Desafío en familia

Querido papá: Hoy aprendimos una gran verdad: ¡Siempre necesitamos a Dios! Luego de profundizar en la historia de Sansón, y conocer sus aciertos y sus errores, te invitamos a que junto a tu hijo armen una “rutina devocional” para recordar esta verdad y buscar así a Dios, cada día.

Tomen una hoja y escriban en ella, algunas ideas de cosas que pueden hacer cada día para pasar un tiempo en familia y buscando a Dios. Aquí te dejamos algunos ejemplos:

-Lunes: Leer juntos un capítulo de la Biblia. Después, conversar sobre lo que más les llamó la atención o lo que sintieron que Dios les quiso decir. Para cerrar, orar en familia y darle gracias a Dios por hablarnos a través de su Palabra.

-Martes: Cantar dos canciones alegres a Dios con todo el corazón. Luego, elegir un versículo para memorizar entre todos, repitiéndolo con gestos o ritmo. Finalizar con una oración agradeciendo a Dios por su amor y su presencia.

-Miércoles: Hacer una lista de peticiones: por amigos, familia, salud o situaciones difíciles. Orar por cada una con fe y confianza. Luego, cantar una canción suave para disfrutar de la presencia de Dios.

-Jueves: Leer juntos un capítulo de la Biblia y seleccionar el versículo favorito. Hacer muchos carteles de este verso mientras cantan una canción a Dios y luego pegarlos por toda la casa. Para terminar orar juntos y pedirle al Señor que su Palabra quede guardada para siempre en los corazones.

-Viernes: Hacer una lista de agradecimientos a Dios por todo lo vivido en la semana. Después, memorizar un nuevo versículo y repetirlo con mucho entusiasmo. Para terminar, orar en familia y agradecerle al Señor por el amor que los une y por cada momento compartido.

Pueden usar esta rutina, o armar la suya propia. Invita a tu hijo a que pegue su rutina en algún lugar visible de la casa, así día tras día pueden ir marcando, las actividades que ya completaron. 

¡Será un gran tiempo para reconocer que necesitamos a Dios! ¡Anímate a tomar pasos de fe junto a tu hijo! Sin dudas, estos recuerdos quedarán grabados para siempre en su corazón.