NÚCLEO TEOLÓGICO: El único Dios verdadero
PRINCIPIO BÍBLICO: Dios es amor
VERSÍCULO ELEMENTAL: ¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! 1 Juan 3:1 NVI
ENFOQUE: Reconozco en mi vida cotidiana las formas cómo Dios ha comunicado amor a mi vida
NÚCLEO TEOLÓGICO: El único Dios verdadero
PRINCIPIO BÍBLICO: Dios es amor
VERSÍCULO ELEMENTAL: ¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! 1 Juan 3:1 NVI
ENFOQUE: Reconozco en mi vida cotidiana las formas cómo Dios ha comunicado amor a mi vida
Encuentro 8: ¡Amor superabundante!
Para esta semana queremos desafiarte a hablar mucho del amor de Dios, la idea es que acompañes a tu hijo durante todos estos días y le ayudes a identificar el amor de Dios en su vida cotidiana. ¿Para qué? Para que en uno de sus tiempos de oración en familia, puedan tomar unos minutos y escriban una carta de amor a Dios.
Ya que nos hemos dado cuenta del amor que Dios nos ofrece en la vida cotidiana y también hemos aprendido cómo Dios se nos ha presentado con amor de padre, así que usaremos dibujos y algunas letras para dar una respuesta a Dios.
Te invitamos a preparar el ambiente en casa, tener materiales a disposición, poner algo de música y hacer tu propia carta como una forma creativa de hablar con Dios.
Cuando terminen, puedes preguntar si alguno quiere compartir con los demás lo que ha escrito. Finaliza con una oración cortita y un gran abrazo en familia.
Encuentro 8: ¡Amor superabundante!
Para esta semana queremos desafiarte a hablar mucho del amor de Dios, la idea es que acompañes a tu hijo durante todos estos días y le ayudes a identificar el amor de Dios en su vida cotidiana. ¿Para qué? Para que en uno de sus tiempos de oración en familia, puedan tomar unos minutos y escriban una carta de amor a Dios.
Ya que nos hemos dado cuenta del amor que Dios nos ofrece en la vida cotidiana y también hemos aprendido cómo Dios se nos ha presentado con amor de padre, así que usaremos dibujos y algunas letras para dar una respuesta a Dios.
Te invitamos a preparar el ambiente en casa, tener materiales a disposición, poner algo de música y hacer tu propia carta como una forma creativa de hablar con Dios.
Cuando terminen, puedes preguntar si alguno quiere compartir con los demás lo que ha escrito. Finaliza con una oración cortita y un gran abrazo en familia.