Desafío Semanal
Desafío Semanal
NÚCLEO TEOLÓGICO: El único Dios verdadero
PRINCIPIO BÍBLICO: Dios sabe todo
VERSÍCULO CLAVE: ¡Qué profundo es el conocimiento, la riqueza y la sabiduría de Dios! ¡Qué indescifrables sus juicios e impenetrables sus caminos! Romanos 11:33 NVI
ENFOQUE: Tengo presente que Dios me conoce desde antes de nacer
NÚCLEO TEOLÓGICO: El único Dios verdadero
PRINCIPIO BÍBLICO: Dios sabe todo
VERSÍCULO CLAVE: ¡Qué profundo es el conocimiento, la riqueza y la sabiduría de Dios! ¡Qué indescifrables sus juicios e impenetrables sus caminos! Romanos 11:33 NVI
ENFOQUE: Tengo presente que Dios me conoce desde antes de nacer
Encuentro 7: ¡De los pelos!
En base a lo que los niños han aprendido sobre Dios en el encuentro, te proponemos el siguiente desafío para esta semana:
Tomen un momento en estos días para sentarte y hacer memoria del día de nacimiento de tu pequeño/a. Pueden buscar fotos del embarazo, tal vez alguna ropa que haya quedado de recién nacido para que pueda ver cuánto ha crecido.
Pueden contarle la alegría del día de su nacimiento, poder ver su carita, sus ojos, si lloraba mucho o no. Cuenten por qué eligieron tan bonito nombre, quiénes fueron a visitarlo por primera vez. Concéntrense en todos aquellos detalles de alegría y bienvenida, en cuánto esperaron conocerlo y luego conversen de que aunque ustedes tuvieron que esperar para ver su carita, Dios ya conocía cómo sería, su color de ojos, su pelo, su nombre y sabe cuánto más va a seguir creciendo.
Tomen un momento para agradecer a Dios por que Él conoce cada detalle de nuestra vida y todo lo que necesitamos.
Encuentro 7: ¡De los pelos!
En base a lo que los niños han aprendido sobre Dios en el encuentro, te proponemos el siguiente desafío para esta semana:
Tomen un momento en estos días para sentarte y hacer memoria del día de nacimiento de tu pequeño/a. Pueden buscar fotos del embarazo, tal vez alguna ropa que haya quedado de recién nacido para que pueda ver cuánto ha crecido.
Pueden contarle la alegría del día de su nacimiento, poder ver su carita, sus ojos, si lloraba mucho o no. Cuenten por qué eligieron tan bonito nombre, quiénes fueron a visitarlo por primera vez. Concéntrense en todos aquellos detalles de alegría y bienvenida, en cuánto esperaron conocerlo y luego conversen de que aunque ustedes tuvieron que esperar para ver su carita, Dios ya conocía cómo sería, su color de ojos, su pelo, su nombre y sabe cuánto más va a seguir creciendo.
Tomen un momento para agradecer a Dios por que Él conoce cada detalle de nuestra vida y todo lo que necesitamos.
info.educacion@lasaventurasdebiper.com.ar
