Dios te ha permitido ser padre o madre de familia, con la bendición de poder compartir tu fe con tus hijos y enseñarles de Dios personalmente, es por eso que hoy te invitamos a que puedas tomar fuerzas y ánimo en Dios para llevar a cabo la tarea más hermosa de todas.

A continuación, esta semana los invitamos a tener un encuentro especial dentro de su hogar.

Primero van a ir al lugar favorito de su casa y leer juntos Salmos 139:1-10, conversen sobre el texto en base a la pregunta ¿Por qué la omnipresencia de Dios es importante en nuestro hogar?

Luego, van a moverse hacia el lugar menos favorito de su hogar y continuar leyendo Salmos 139:23-24.  Compartan juntos sobre cuán profundo puede conocernos Dios (nuestro corazón y pensamientos). 

Puedes conversar con él sobre que no hay ningún espacio, por pequeño que sea, en el que podemos esconder de Dios los pensamientos que nos inquietan o lo que lastima nuestro corazón. En estos lugares menos agradables también podemos buscar a Dios porque quiere sanarnos y ayudarnos a actuar correctamente.

Oren juntos e inviten a Dios a habitar en medio de su familia, su hogar y sus corazones. 

Si todavía tienen ánimos de más, podrían hacer carteles divertidos para su familia con stickers, memes o frases en las que expresen que Dios está presente allí también. Puedes esconderlos en los placares, cajones o pegar detrás de las puertas o espejos.  

¡Es tiempo de empezar!