NÚCLEO TEOLÓGICO: El único Dios verdadero
PRINCIPIO BÍBLICO: Dios no miente, es veraz y fiel
VERSÍCULO CLAVE: ¡Dios no es como nosotros! No dice mentira alguna ni cambia de parecer. Dios cumple lo que promete.” Números 23:19 TLA
ENFOQUE: Me propongo recordar a diario las promesas de Dios
NÚCLEO TEOLÓGICO: El único Dios verdadero
PRINCIPIO BÍBLICO: Dios no miente, es veraz y fiel
VERSÍCULO CLAVE: ¡Dios no es como nosotros! No dice mentira alguna ni cambia de parecer. Dios cumple lo que promete.” Números 23:19 TLA
ENFOQUE: Me propongo recordar a diario las promesas de Dios
Encuentro 11: ¡Dios y sus promesas!
En base a lo que los niños han aprendido sobre Dios en el encuentro, te proponemos el siguiente desafío para esta semana:
En nuestro espacio de devocional familiar o en la habitación harán juntos un mural de promesas de Dios como recordatorio.
Cada día te proponemos pensar en las promesas de Dios y poder juntos hacer dibujos que nos recuerden lo que Dios prometió y un cartel con la palabra “promesas”.
Te animamos en esta semana y de aquí en adelante poder reforzar estas promesas en los momentos clave, es decir, ante la necesidad de protección poder recordar lo que Dios dijo poniéndolo en palabras para que los niños lo asimilen. Ante una necesidad o al momento de agradecer por los alimentos, traer a memoria su promesa. Ante un comportamiento específico, pedir a Dios que les enseñe cómo comportarse mejor.
Encuentro 11: ¡Dios y sus promesas!
En base a lo que los niños han aprendido sobre Dios en el encuentro, te proponemos el siguiente desafío para esta semana:
En nuestro espacio de devocional familiar o en la habitación harán juntos un mural de promesas de Dios como recordatorio.
Cada día te proponemos pensar en las promesas de Dios y poder juntos hacer dibujos que nos recuerden lo que Dios prometió y un cartel con la palabra “promesas”.
Te animamos en esta semana y de aquí en adelante poder reforzar estas promesas en los momentos clave, es decir, ante la necesidad de protección poder recordar lo que Dios dijo poniéndolo en palabras para que los niños lo asimilen. Ante una necesidad o al momento de agradecer por los alimentos, traer a memoria su promesa. Ante un comportamiento específico, pedir a Dios que les enseñe cómo comportarse mejor.